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Tradicionalmente, para monitorizar una red de ordenadores se ha hecho uso de un sistema que controla constantemente dicha red y que notifica al administrador del sistema en caso de que haya interrupciones. Sin embargo, actualmente hay que ampliar la definición: el monitoreo de la red también abarca la supervisión del funcionamiento e incluso el uso de la red.
Cloud computing y movilidad en la empresa.
La red que se va a monitorizar es bastante amplia. Incluye los siguientes elementos:
Si la organización emplea una red WAN (red de área extensa), una o varias LAN (red de área local), hosts o soporta aplicaciones intensivas en red, debe implementar una solución que supervise continuamente la red. Pero veamos con un más detalle las 5 razones por las que las organizaciones necesitan monitorizar la red.
“¿Qué causa cortes en los sistemas de TI?” El error humano, los problemas de configuración y los factores ambientales pueden contribuir. Monitorizar la red es una de las maneras más básicas y sencillas de evitar que estas interrupciones ocurran.
Monitorizar la red ofrece la visibilidad necesaria para mantenerse un paso por delante de posibles problemas. Al mostrar los datos de rendimiento de la red en vivo en una interfaz de fácil lectura, el software de monitorización de red ayuda a identificar interrupciones que podrían causar cuellos de botella.
“¿La red se ha vuelto lenta?” Podría deberse a un determinado router que se bloquea con frecuencia, pero ¿en qué rack está?, ¿qué está conectado a él?
Monitorizar la red simplifica la detección y corrección de problemas. Gracias a mapas de la red, podemos ver el estado de rendimiento de los distintos dispositivos, por lo que es fácil ver cuándo algo funciona de anormal. Como los mapas de la red hacen un inventario de todos los dispositivos y muestran las conexiones físicas entre ellos, la búsqueda de dispositivos problemáticos y la comprensión del impacto de una posible interrupción conlleva mucho menos tiempo.
Además, la mayoría de las soluciones para monitorizar la red permiten hacer clic en un dispositivo en particular y extraer datos clave de rendimiento, como la disponibilidad, la pérdida de paquetes, el tiempo de respuesta, el tráfico y las tasas de error entre muchas otras funciones. Todo esto ayuda a identificar más rápidamente la raíz de un problema en la red.
La seguridad de los datos críticos de la empresa es una cuestión de gran importancia para cualquier organización. El coste de una violación de datos puede ser mayor de lo que una empresa puede soportar. Los hackers suelen dirigirse a empresas que intuyen que están mal equipadas para gestionar una violación de seguridad, por lo que muchas víctimas son pymes que creen que no pueden justificar el coste de un sistema de detección de intrusiones y que no han adoptado las medidas defensivas apropiadas contra el delito cibernético.
Cuando implantar uno de estos sistemas de detección de intrusiones no es factible, monitorizar la red puede ser una alternativa asequible. La supervisión de la red proporciona información valiosa sobre la fuente y la naturaleza de todo el tráfico que fluye a través de la red. Es fácil detectar cambios sospechosos en el tráfico entrante y saliente, mediante el seguimiento regular del tráfico en dispositivos críticos. Poder ver la actividad de la red en profundidad ayuda a identificar de forma proactiva la actividad maliciosa y a encontrar agujeros que podrían convertirse en mayores problemas de seguridad en el futuro.
Con la innovación tecnológica y el aumento de la cantidad de dispositivos conectados, los entornos de TI de hoy en día están creciendo mucho en tamaño. Se espera que el número de dispositivos conectados a Internet llegue a 20.400 millones para 2020, según un informe de Gartner, y aunque la mayoría de estos dispositivos están enfocados al consumidor, 3.100 millones estarán relacionados con las empresas a finales de este año 2017. Sensores con acceso a Internet, dispositivos inalámbricos o tecnologías en la nube, todo este equipo necesita monitorizarse continuamente para detectar fluctuaciones y actividades sospechosas.
Las redes también están creciendo en complejidad. Ya se trate de migraciones a la nube o de transiciones IPv6, son necesarias herramientas flexibles y confiables que ayuden a supervisar todos los activos y garantizar un rendimiento uniforme, incluso en medio del cambio.
El coste del tiempo de inactividad de la red en una empresa puede llegar a contabilizarse por miles de euros por minuto. Pero no solo el coste financiero directo es importante, también lo es el impacto que las interrupciones tienen en la satisfacción del cliente y la reputación de la empresa en el mercado. Estar alerta de la red las 24 horas del día, los 7 días a la semana, permite a TI abordar las áreas problemáticas antes de que se conviertan en emergencias, actuar más rápidamente y, en última instancia, solucionar el problema antes de que se produzca un fallo. Monitorizar la red es una inversión que se justifica rápidamente por su alto ROI.
Establecer o adoptar un método para monitorizar la red es esencial para asegurar el éxito de la empresa y la seguridad de la información de la organización. Esta monitorización debe incluir sistemas que puedan detectar y responder automáticamente a amenazas y problemas de rendimiento en tiempo real, así como predecir posibles problemas en el futuro.
Digitalización empresarial desde cero