Digitalizarse como herramienta competitiva
Hoy en día, únicamente un 59% de los directores de las empresas consideran la digitalización, también conocida como “transformación digital”, como una de las prioridades y uno de los objetivos empresariales. Y es que, digitalizarse, conlleva una gran inversión financiera en innovaciones tecnológicas, y en nuevos métodos y estrategias comerciales. Debido a esta razón, generalmente, solo suelen ser las grandes sociedades quienes se arriesgan a invertir en digitalizarse. No obstante, es importante tener en cuenta los factores de la digitalización en el mundo laboral para tomar la correcta decisión.
En primer lugar, digitalizarse permite a las empresas abarcar un nuevo mercado laboral, a nivel mundial, gracias a Internet y a las redes sociales. Y es que, gracias a la digitalización, las pequeñas empresas pueden darse a conocer y ampliar su mercado, así como también adquirir nuevas ideas y nuevos contactos profesionales de gran importancia. La digitalización posibilita un mejor reporting, una mayor comunicación y una mejor colaboración a nivel mundial.
En segundo lugar, mediante la digitalización de las empresas, se puede obtener un mayor grado de competencias de los empleados y colaboradores. Es decir, las formaciones, las inmersiones digitales y la creación de comunidades, permiten a las empresas el aprendizaje de nuevos métodos y por lo tanto, el desarrollo de sus competencias, lo que posibilita una mejor adaptación al mercado laboral.
Sin embargo, digitalizarse, no únicamente ayuda a las empresas en el ámbito de las formaciones. Sino que, también, posibilita una gran innovación empresarial. Es decir, digitalizarse permite a las empresas la adquisición de nuevas ideas, así como también la adquisición de nuevos métodos tecnológicos. Igualmente, cabe considerar que digitalizarse es también una gran técnica de marketing a nivel mundial ya que las empresas pueden dar a conocer sus productos desde cualquier lugar del mundo.
Por otra parte, digitalizarse conlleva infinidad de ventajas en la empresa, tanto externas como internas. A nivel interno de la empresa, digitalizarse posibilita una disminución de los costes de relación-cliente, y también un aumento en la productividad. Además, la transformación digital implica también una mejora en la solución de problemas. Por otra parte, a nivel externo de la empresa, el proceso de digitalización fomenta el incremento de fidelización de los clientes, así como también facilita la dirección multicanal empresarial.
Así pues, en la actualidad, concretamente en los últimos diez años, los riesgos en las empresas han aumentado notablemente. Por esta razón, digitalizarse no significa únicamente innovarse, sino que, es cuestión de supervivencia para las empresas. Actualmente, la digitalización es la respuesta a la necesidad de adaptación de las empresas, en un mercado laboral cada vez más complicado.
