Cuando se quiere iniciar un negocio, sea del tipo que sea, se debe realizar previamente un estudio o análisis del proyecto que se quiere llevar a cabo y, finalmente, tras el estudio realizado, valorar el desarrollo o no del negocio. El objetivo principal del análisis de la viabilidad de un proyecto es garantizar que este sea técnicamente factible, económicamente justificable y, por supuesto, legal. En pocas palabras, saber si la inversión que se va a realizar va a ser o no rentable. Los principales beneficios de hacer un análisis de la viabilidad de un proyecto pueden ser:
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Algunos de los aspectos que debe incluir un análisis de viabilidad de un proyecto son:
Es clave ser objetivos a la hora de realizar el estudio ya que hay mucho en juego y no solo la inversión que se realiza, sino la imagen de cara al cliente, posibles inversores e instituciones de crédito, etc…
Entrando más en detalle, se deben analizar distintas áreas para comprobar la factibilidad y viabilidad de un proyecto. Estas áreas son:
No es necesario decir que cumplir con los tiempos marcados en un proyecto es clave para que este tenga éxito. Cuando se programa la viabilidad hay que calcular el tiempo necesario para terminar el proyecto, mediante distintos métodos de estimación y, estos tiempos, deben cumplirse.
Antes de iniciar una aventura empresarial, hay que realizar un análisis del contexto externo e interno que se puede dar, además de valorar la viabilidad y rentabilidad del negocio. Para ello, se realizan análisis de viabilidad que nos ayudarán a determinar mejor los objetivos que se quieren lograr y como desarrollarlos.