Alinear las TIC con los objetivos estratégicos de la empresa

El carácter estratégico de las TIC (tecnologías de la información y la comunicación) está más que claro en la mayoría de las empresas. Tienen un papel primordial y fundamental, tanto en el soporte de los negocios existentes y en la identificación de objetivos estratégicos, como en la creación de nuevos. Esto no quita que sí se cuestione o se cree discusión sobre cuál debe de ser su dimensionamiento, los costes operativos o las prioridades de las TIC respecto a la empresa.

Al final, las TIC deben tener una presencia, en la justa medida, respecto a la empresa donde deba de estar o implantarse. Es por ello que, deben de estar alineados los objetivos de las TI (Tecnologías de la Información) con la estrategia de negocio. Para ello, dispondremos de unos procedimientos de evaluación objetiva del Gobierno TI, el cual es el motor de transformación del negocio a través de la tecnología.

Los planes TI nos van a servir para ordenar, priorizar y concretar las políticas que permitan controlar la adquisición, el uso y la administración de los recursos TI. Si, además, integramos la perspectiva de negocio con el enfoque TI, estableceremos un marco tecnológico de resolución de las necesidades de la organización o empresa, contribuyendo al éxito.  

Fases del plan TI orientado a objetivos estratégicos

Un plan TI, orientado a la consecución de los objetivos estratégicos, debería de constar de 4 fases:

• Comprensión de la estrategia de negocio. La principal premisa será la de identificar los objetivos y prioridades de negocio, así como sus implicaciones sobre los sistemas de información.
• Análisis de las TI. Necesitaremos disponer de una visión completa de la situación actual de las TI.
• Formulación de la estrategia. En esta fase, deberemos de crear la estrategia TI, basada en las anteriores dos fases y alineada con el negocio.
• Plan de implantación. Plasmar la secuencia de acciones a llevar a cabo, a lo largo del tiempo y teniendo en cuenta la priorización de cada una de ellas según su importancia y momento de llevarlas a cabo.

Mediante los planes TI, podremos disponer de herramientas que faciliten la consecución de los objetivos estratégicos de las organizaciones o empresas. Si realizamos una buena labor en la planificación y diseño de los planes TI, estaremos consiguiendo que todos los procesos estén óptimamente gestionados y controlados para asegurar la calidad y sean soporte del cumplimiento de los objetivos del negocio.

Debemos entender las áreas de TI como los mejores aliados de valor para el Negocio, dejando de ser percibidos solo como agentes de soporte técnico. Es primordial que, en todas las empresas, consideremos a las áreas de TI como piezas clave para la gestión de servicios con el objetivo fundamental de apoyar el cumplimiento de los objetivos de la empresa. Es necesario que los sistemas de información de las organizaciones o empresas proporcionen el valor y la eficiencia que exigen, tanto los usuarios como el negocio.

Es hora de hacer un lugar a las áreas de TI de las empresas en la propia empresa, viendo todas las áreas como una globalidad y un mismo conjunto. La participación de todas ellas debe ser importante y la alineación con los objetivos estratégicos de la empresa ha de ser eje prioritario de cada una de ellas, deben estar en perfecta sintonía con una estrategia general de negocio.

Escrito por Luis Vilanova. Interim Information Technology Manager. www.luisvilanova.es